Winnie The Pooh y Bambi ahora pasan a ser de dominio público, es decir, cualquier persona puede copiar y adaptar sin tener problemas legales. De esta manera, los derechos del autor de estas obras pueden usarse como mejor le parezca a los creadores de las nuevas producciones. A partir del 01 de enero se levantaron las restricciones de propiedad intelectual de todas las obras creadas en 1926 hacia atrás. Puesto que en Estados Unidos hay un plazo de 95 años (antes 70 años) para la protección de derechos de autor. De esta forma, una vez pasado este tiempo la obra pasa a ser pública. Esto se hace con el objetivo de que las obras no se pierdan en el tiempo o sean olvidadas y cualquier persona pueda reinventarlas.
Por lo que Winnie The Pooh, una obra de Alan Alexander Milne, y Bambi, A life in the Woods de Felix Salten, ahora pueden ser reinventadas por nuevas mentes creativas. No obstante, las adaptaciones hechas por Disney (y otras empresas) sí están protegidas por derechos de autor desde su año de creación. Por este motivo, cualquier adaptación que se quiera hacer de alguna de estas obras debera basarse siempre en el original. Además, sólo se pueden utilizar personajes que se mencionen en dichas obras. Por lo que personajes como Tigger que apareció 2 años después en otro libro, sigue protegido por derechos de autor.
Finalmente, además de esta liberación de derechos con Winnie the Pooh y Bambi, también se liberaron más de 400,000 grabaciones de sonido que se publicaron antes de 1923. Muchas de estas canciones pertenecen al género de jazz y gospel con la cantante Ethel Waters e incluso ópera con el recordado cantante italiano Enrico Caruso.
Winnie The Pooh y su legado a través de Disney
La mayoría de las personas conoce Winnie The Pooh gracias a la adaptación de Disney. En donde Christopher Robin conoce a un grupo de animales parlanchines hechos de peluche con los cuáles pasa diversas aventuras infantiles. Sin embargo, con el tiempo Pooh y sus amigos comenzaron a verse opacados por los nuevos dibujos animados que salían para los niños. No obstante, la importancia de las enseñanzas sobre la amistad y otros valores pudimos volver a verlo a través de la saga Kingdom Hearts, así como la película Christopher Robin del 2018. No cabe duda que esta liberación de derechos hará que se pueda experimentar con la obra para traernos nuevas adaptaciones.
Fuente: Cartoon Brew
