The Legend of Zelda es una de las franquicias más reconocidas y populares a nivel mundial, tanto así que muchos de sus fanáticos esperan con ansias la llegada del nuevo título para Wii U – y a la vez rezan para que esta no aparezca en la nueva consola de nombre clave: NX – .
Prepárate entonces a descubrir el lado más oscuro de esta sección. Olvídate de Rambo, Shaq Fu, Spider-Man: Friend or Foe y del juego basado en la cinta de Street Fighter que hemos dado con palo aquí. Link: The Faces of Evil y Zelda: The Wand of Gamelon son dos ejemplos de juegos que ni tú, ni tus hijos, ni tus nietos deberán probar alguna vez.
Pero antes de que los dedos se me sancochen, vamos a explicar de qué va la historia en Link: The Faces of Evil…
No. ¿Sabes qué? Mejor te cuento toda la historia del juego porque no quiero que sufras:
Link del universo de Philips CD-i está muy aburrido de no encontrar ninguna aventura en Hyrule porque el Ganon de ese universo ha sido derrotado y humillado – para variar – Sin embargo, resulta que en realidad este estaba causando el caos en una isla que a nadie en el reino de Hyrule le importaba llamada Koridai. Link, por supuesto desconoce de estos hechos y recién se enterara cuando un mago llamado Gwonam llegue montado en la alfombra voladora – que posiblemente se le haya robado a Aladdin – a advertirle del peligro que representa Ganon.
Embarcado en esta peligrosa aventura, Link deberá cruzar los peligros que hay en Koridai utilizando un libro – que también lleva el nombre de la isla – y derrotar a los secuaces de Ganon: Estatuas de piedra. Sí: ESTATUAS DE PIEDRA.
Como sea, al final hay un giro inesperado, algo que nunca me lo hubiera imaginado, un vuelco total a toda la narración y que hace que todo en esta aventura deje de tener sentido: Link se entera que Ganon secuestró a la princesa Zelda – inserte sonido de grillos aquí – .
Finalmente, el duelo final entre estos dos rivales llega a su conclusión cuando, en un movimiento inesperado y arriesgado, Link le lanza el libro de Koridai a Ganon, haciendo que este caiga rendido. Así, sin más, sólo cae derrotado por eso.
No te preocupes, aquí no acaba la cosa. Aún nos falta: Zelda: The Wand of Gamelon. Para no entrar en tantos detalles absurdos, vamos a resumirlo de la siguiente forma:
- Ganon nuevamente es el malo.
- El juego salió al mismo tiempo que The Faces of Evil (Qué lindos) .
- La gente recién se dió cuenta que ambos títulos eran bazofias.
- No sé porque sigo escribiendo este artículo.
La historia nos cuenta cómo el Rey de Hyrule se entera de que Ganon está atacando el reino de Gamelon, por lo que él mismo decide ir a enfrentarse a este poderoso enemigo. Por desgracia, a nadie le importa manejar a un viejo decrépito y desaparece. Sin embargo, Link había recibido la orden de que si el Rey desapareciera este debería ir a continuar el trabajo. Pero, cómo el personaje era tan insoportable, también desaparece.
Es entonces cuando la princesa Zelda, cansada del machismo en Hyrule, se embarca en su propia aventura para parar de una vez por todas a Ganon. Para ya no aburrirlos, Zelda gana, vence a Ganon lanzándole un objeto – otra vez –, el Rey y Link resultan estar vivos y todos viven felices y riendo en el reino de Hyrule.
Y bueno, creo que este ha sido el final de este artículo espero les haya gust… ¡Diablos! Aún faltan algunos detalles que decir de ambos juegos.
Ambos títulos son juegos bidimensionales con scroll lateral, tratando de imitar la genialidad de Zelda II: The Adventure of Link, pero consiguiendo resultados desastrosos. El control de ambos personajes (Link y Zelda) resulta ser un mamarracho mundial. Podría perdonar sus gráficos, pero estos se ven opacados por las animaciones, en ambos juegos siendo elaborados por un equipo de 4 rusos que costaban muy barato. Si quieres comprobarlo por ti mismo, o me estás llamando exagerado, échales un vistazo en Youtube.
Finalmente – esta vez sí es la despedida – a quien debemos echarle la culpa de todo esto es a Animation Magic, que de magia no hizo nada y de animación mucho menos. Pero tranquilo, amigo/a aventurero/a. Ambos títulos y un tercero que merodea por ahí que se llama Zelda’s Adventure – gracias al cielo que no lo jugué – no pertenecen a la cronología de The Legend of Zelda (Ni siquiera fueron hechos por Nintendo, menos mal), por lo que ya puedes respirar tranquilo y puedes cerrar esta página e ir a disfrutar de un buen juego de esta saga.