Cuando Godfall fue anunciado y mostró sus primeros avances, toda la comunidad enloqueció por lo bien que se veía la propuesta. La promesa de ser uno de los primeros exclusivos de la próxima generación no hizo más que irse abajo cuando finalmente los jugadores pudieron probar el juego. Y es que a pesar de su estética bastante bien trabajada, habían carencias en todos los demás sentidos del título. Hoy en día vuelve a ser tema de conversación, pues su reciente inclusión en el programa de PlayStation Plus no hizo más que enfurecer a la comunidad.
Lo cierto es que Godfall ha caído en una lista negra para los jugadores, y parece que todo se agravó recientemente. Resulta que hace poco anunciaron cuáles serían los juegos que recibirían los usuarios con la suscripción pagada de PlayStation Plus. Esto podría sonar bien, y de hecho una parte de la comunidad estaba pensando en darle una oportunidad a Godfall. Sin embargo, todo cambió cuando PlayStation confirmó que se trataba de Godfall: Challenger Edition.
Por si sabes por qué se enojo la comunidad, resulta que Godfall: Challenger Edition no es la versión completa del juego. De hecho, es como un demo en el que no se puede jugar a la campaña y sólo se pueden probar 3 modos del multijugador. Además de todo esto, la gota que derramó el vaso fue saber que si los jugadores quieren jugar el modo campaña, entonces tendrán que comprar por separado Godfall: Deluxe Edition.
La comunidad está furiosa con Godfall
Las reacciones de los jugadores ante esto no se hicieron esperar, y las publicaciones del juego ya están inundadas por comentarios negativos. No es de extrañar que los jugadores estén furiosos, sobretodo tomando en cuenta que están pagando por una suscripción mensual que regala juegos a sus usuarios, y en este caso están recibiendo una versión de prueba.
Por si esto fuera mucho, resulta que la próxima semana también regalarán Godfall: Challenger Edition a todos los usuarios de Epic Games, en lo que parece ser una burla directa a toda la comunidad de PlayStation Plus. Lamentablemente, pareciera que la decisión está tomada, por lo que no hay mucho que se pueda hacer para solucionarlo.