Los Autobots más famosos han vuelto al mundo de los videojuegos, ahora en manos de Platinum Games, algo más que interesante. Tras una serie de películas que dejaron mucho que desear y dos juegos – “Fall of Cybertron” y “Rise of the Dark Spark” – con un parecido sabor de boca, todo iba cuesta abajo para la franquicia. No todo estaba perdido, pues en el E3 de este año Activision anunció Transformers: Devastation, título que iba ser desarrollado nada más ni nada menos que por Platinum Games, desarrolladores japonés encargados de grandes títulos como Bayonetta 1 y 2 o el esperado Star Fox Zero.
Devastation te sumerge en la clásica serie de los 80s en todos los sentidos. Los gráficos estilo “cel shaded” dieron en el clavo y hace del juego especial; cada personaje se ve perfecto y los escenarios son envolventes. El juego tiene su propio estilo y es reconocible a leguas. A pesar de que no soy muy apegado a la franquicia de Transformers y de que tengo poco conocimiento de la serie al cual el juego hace homenaje, cada momento se sentía vivo, siempre dando esa vibra clásica de antaño.
El juego tiene un gameplay de acción hack and slash, género insignia de Platinum Games. Los controles son sólidos y primordialmente fluidos. Es muy sencillo golpear a tus oponentes, siempre usando distintos combos o lo que prefieras; todo funciona muy bien. Hay que resaltar lo bien que les quedó las transformaciones a los desarrolladores japoneses.
Podrás cambiar entre tu modo robot y tu modo auto con solo presionar un botón. Esto se siente genial, especialmente cuando atas estas transformaciones a tus golpes para crear combos más efectivos. A pesar de esto, los ataques pueden llegar a ser muy limitados a través del juego, por lo cual puede que a veces solo recurras al mismo set de combos una y otra vez. (Aunque no puedo decir que hacerlos no te da cierto sentido de satisfacción.)
Tendrás la opción de elegir entre 5 de los Autobots más famosos: Optimus Prime, Bumblebee, Grimlock, Sideswipe y Wheeljack. Cada uno tiene sus propias características y todos se sienten muy bien al momento de jugar. Puedes atacar de forma veloz con Bumblebee, golpear siendo un camión con Optimus o morder a todos con Grimlock. A mi parecer este último el más único debido a su forma de usar ya que, para los que no conocen mucho de Transformers, es un dinosaurio robótico.
A estos personajes se les puede asignar armas livianas tales como pistolas y espadas o armas pesadas como un martillo. Estas pueden ser subidas de nivel hasta el 10 y se pueden conseguir venciendo a enemigos, encontrándolas en la ciudad o creándolas combinando armas que previamente obtuviste. Siempre es importante contar con un arma de larga distancia ya que muchos de tus enemigos Decepticons podrán volar en ocasiones o aparecer a distancias difíciles de alcanzar. En cuanto a los Autobots, estos pueden mejorar sus habilidades por medio de un sistema de creación de mejoras, pero es completamente aleatorio y nunca sabrás qué obtendrás.
La historia es corta, pero me parece que es suficientemente interesante para envolver al jugador. Es muy normal ganarse el juego en un día y no solo porque sea corto sino porque una vez empiezas no quieres parar. Los Decepticons también salen genial en el juego y se roban el show con sus distintas personalidades. También sobresale Devastator, que es el resultado de la unión de varios Decepticons llamados Constructicons.
Lamentablemente, el juego está lejos de ser perfecto ya que recicla mucho a los villanos, tanto a los que nos encontramos en el camino como a los jefes y mini-jefes. Normalmente nos enfrentaremos una y otra vez a los mismos personajes, aunque con algunas diferencias en sus ataques o situación. Aunque lo peor son – tal vez lo más destacable del juego por como se ven – los escenarios. Son muy repetitivos, al punto de que es muy fácil perderse una y otra vez hasta que te rindas y solo te limites a seguir el objetivo del mapa que te dan. Se repiten tantas veces que sentirás que cada locación pierde su esencia y es solo una más del montón.
Transformers: Devastation es una grata sorpresa. Su gameplay fluido y excelentes gráficos te hace sentir como si estuvieras jugando un largo y buen capítulo de la famosa serie de los 80s. Sin embargo, muchas limitaciones al momento de deshacerte de tus enemigos, sus escenarios repetidos y demás no dejan que este juego sea otra joya de Platinum Games.
