¡Por fin llega la fiesta al Wii U! Tras 17 años llenos de entregas de Mario Party uno ya sabe que esperarse: Un juego simple pero divertido donde pasar un buen tiempo con los amigos esta casi garantizado. A pesar de esto, Mario Party 10 pone nuevas cartas sobre la mesa, haciendo uso del GamePad y de los tan codiciados amiibos, planteando muy buenas ideas pero lamentablemente reciclando errores de juegos anteriores. El juego cuenta con tres modos principales: el Mario Party estándar, Bowser Party y el modo amiibo. Cada uno tiene sus propias propuestas y mucho potencial, pero lamentablemente malas decisiones por parte de Nd Cube hacen que no terminen de satisfacer los estándares a los que estamos acostumbrados los que llevamos ya mucho tiempo disfrutando de esta franquicia.
El modo Mario Party trae de vuelta el concepto de la entrega anterior. El tablero es lineal y los cuatro participantes se mueven juntos ya que se encuentran todos en un vehículo. Esto de por si le quita muchos elementos de estrategia al juego ya que uno no tiene poder de decidir hacia donde dirigirse y tiene que basar sus decisiones dependiendo en que sector de la tabla lo hayan llevado los demás competidores. Jefes, normalmente enemigos conocidos de la franquicia de Mario como un Goomba gigante o King Boo, a través del tablero y algunos eventos como lava saltando en puentes hacen de la experiencia más divertida, pero en lo general duran muy poco y prácticamente no influyen mucho en el resultado final.
El juego constantemente te entrega distintos dados, algunos con solo ciertos números en ellos como el de 4-5-6 y otros con efectos especiales como el dado lento que te dará la oportunidad de prácticamente elegir cuantos espacios moverte. Este me parece el concepto más alentador de este modo ya que es una de las pocas cosas que te permite planear estratégicamente tus movimientos y poder influir en los demás. Constantemente usé los dados cortos para dejar a mis amigos cerca de un puesto donde les quitarían estrellas o donde un evento los afectaría, lo cual no creo que les hiciera mucha gracia. El juego se ve genial en HD y los tableros son variados y únicos, haciendo de la experiencia muy novedosa. Lastima que son muy pocos.
Uno de los problemas más grandes del modo Mario Party es que solo jugaras minijuegos si caes en un espacio de Vs. específico, lo que hace posible, así como lo oyen, jugar un tablero en su totalidad sin tener que jugar un solo minijuego. ¿Cual es el punto entonces de jugar Mario Party? Esto, claro, prácticamente nunca ocurre, pero la simple idea hace que me den escalofríos. Es cierto que, debido a esto, la cantidad de minijuegos en una sesión de Mario Party es muy reducida, pero estos son excelentes, muy variados y divertidos de jugar. Me encantaría decir que es por los minijuegos que este juego resalta, pero son tan pocas las oportunidades que tienes de jugarlos en el tablero que sería mentir.
Para jugar Mario Party 10 se hace uso primordial de los Wii Remotes ya que para muchos minijuegos tendrás que apuntar o mover el control de cierta manera, lo cual me recuerda porque me frustraba tanto las versiones de Wii. El uso obligatorio de este hacen de los demás controles, como el Wii U Pro Controller, inservibles. Esto quita muchas opciones para poder jugar con más personas. Incluso tuve que pedir prestado un par de Wii Remotes para poder disfrutar el juego de a cuatro.
El modo de Bowser Party es donde recae el fuerte del Mario Party 10. Este modo introduce a un quinto jugador que hará de Bowser por medio del uso del GamePad. Los cuatro jugadores que comparten el vehículo tiraran sus respectivos dados tratando de escapar de Bowser ya que si este los alcanza se iniciara un minijuego en el cual el jugador que hace de Bowser tendrá la oportunidad de quitarles vidas. Los jugadores en el vehículo pierden si todos sus integrantes se quedan sin vidas y ganan si logran exitosamente llegar a la meta. Este modo comparte solo tres tableros del modo Mario Party, lo cual es raro ya que no veo motivo para no haber incluido todos.
Jugar como Bowser es genial. Usarás el GamePad de maneras innovadoras en los pocos pero muy divertidos minijuegos a tu disposición. En unos tendrás que soplar a través del micrófono para lanzar bolas de juego y otras veces incluso tendrás que jugar bingo para tratar de arrebatarles vidas a tus contrincantes. A pesar de esto también me divertí mucho desde la otra perspectiva: la de los jugadores tratando de escapar de Bowser. Pero son experiencias distintas y casi siempre había discusiones por quién sería el próximo en usar al rey de los Koopas.
A veces sentía que el juego le daba mucha ventaja a Bowser ya que prácticamente en todos los turnos lograba alcanzar a los jugadores, pero me parece que en general se logra balancear bien con los variados minijuegos que en ocasiones favorecen a una de las dos partes. Mi experiencia está partida por derrotas y victorias divididas equitativamente. Este modo resalta y es la mejor experiencia de Mario Party 10. Incluso, en mi opinión, es el mejor uso del GamePad hasta el momento por parte de Nintendo.
Nintendo puso mucho énfasis en el uso de amiibos, creando un modo exclusivo que solo se puede jugar con las pequeñas figuras. Incluso creó una nueva línea de Super Mario para este juego que incluye amiibos de Mario, Luigi, Peach, Yoshi, Bowser y Toad (Posiblemente con Rosalina, Donkey Kong y Wario en el camino). Aparte de estos podrás usar también los de la línea de Super Smash Bros., teniendo cada uno un efecto distinto. Los que sean de los personajes mencionados te darán nuevos tableros y serán jugables, mientras que los otros te darán puntos extras de Mario Party. Hay que tener en cuenta que si utilizas el amiibo de Bowser todos los minijuegos serán los del Bowser Party, pero esta vez solo ganarás si le quitas todas las vidas a tus contrincantes. Solo necesitarás un amiibo para jugar este modo en multijugador, pero no será la experiencia completa.
Antes de empezar a jugar puedes asignarle un token con un efecto especial al amiibo que estes usando, lo cual puede hacer la diferencia entre la victoria y la derrota. Si los demas jugadores no usan un amiibo no podrán utilizar los tokens.
Para ser sincero, este era el modo que más emocionaba ya que se juega igual al Mario Party clásico: Se consiguen monedas a través del tablero, hay estrellas por ganar y luego de transcurrir los cuatro turnos hay un minijuego. Lamentablemente, amiibo Party no era lo que esperaba. Si estas jugando con amiibos deberás ponerlos en el escáner constantemente para tirar el dado e incluso parar ruletas, lo cual lo hace molesto e incomodo. Los tableros son únicos dependiendo del amiibo que uses, pero todos son rectangulares y muy pequeños, lo cual aburre a pesar de que por fin estemos jugando el Mario Party que tanto conocemos y queremos.
Si este es tu primer Mario Party seguro los disfrutarás. Y sí: Mario Party 10 es muy divertido, pero tras 17 años de secuela tras secuela el juego parece todavía no poder darle a nota. El uso del GamePad y amiibos es novedoso, pero lamentablemente no es suficiente para que la fiesta continúe. Esto, sumado a la poca frecuencia de minijuegos, no vuelven a esta una entrega para recordar.