En 1998, un pequeño equipo de desarrolladores japoneses pasó ocho meses trabajando en un juego llamado Magic Castle. Luego lo enviaron como propuesta a siete compañías importantes, incluida Sony, que para entonces había lanzado la PS1. Nunca llegó a ser algo concreto, pero gracias a los emuladores y al esfuerzo de un miembro del equipo original, ahora podemos jugarlo y disfrutarlo de todos modos.
Uno de los miembros del equipo, PIROWO, encontró recientemente el código fuente del proyecto, creado en Net Yaroze, y decidió atar sus cabos sueltos y lanzarlo al público. Cabe resaltar que no es el juego completo, sino algo más parecido a una demo, debido a que eso fue todo lo que PIROWO pudo completar. Sin embargo, es más que suficiente para los que trabajaron en este juego hace más de dos décadas.
Según cuenta la historia, a Sony le encantó lo que vio del juego para la PS1. Lamentablemente, luego también falló al pedirles a los desarrolladores que abandonaran Magic Castle y se pusieran a trabajar en otra cosa.
Los desarrolladores originales hablaron recientemente en una entrevista sobre cosas como cómo estuvieron cerca de hacer el juego con otra «compañía que produce famosos juegos de rol japoneses». Sin embargo, ese prospecto también se cayó.
Fuente: Kotaku
